BUSCANDO DONDE JUGAR

Hace un año o así me dijeron si quería ayudar a vaciar una empresa de material sanitario enfrente de mi casa, que algo me pagarían por ayudarlos, y lógicamente les dije que sí. Me pareció increíble la gran cantidad de cosas que había que sacar de allí. Habían acumulado cosas durante un montón de años que ya no deberían de estar allí. Y como ni tan siquiera sabían lo que tenían me dejaron coger algunas cosas que me gustasen o que me valiesen para cualquier cosa, no cogí muchas cosas cogí unas tijera bastante buenas, unas pinzas largas inoxidables y una goma elastica plana colores que me podía servir para montar un tirachinas y poder disparar una piedritas en el bosque, ya que no puedo usar la pistola de aire comprimido al aire libre. Menos mal que el otro día estuve convenciendo a uno de mis amigos que tiene un terreno para que me lleve a disparar, ya que en una parcela privada es legal jugar con la pistola de aire comprimido. Desde siempre me han gustado las armas, pero donde vivo no hay campos de tiro a los que pueda acudir y me tengo que buscar la vida para poder jugar un poco con la pistola de aire comprimido. Cuando éramos unos niños de unos trece años, dos amigos y yo íbamos a la finca de los padres de uno de ellos y nos pasábamos las tardes enteras disparando nuestras pistolas de aire comprimido y una escopeta de aire comprimido que tenía uno de mis amigos. Pero esa finca hace ya muchos años que no pertenece a la familia de mi amigo porque de lo contrario estoy seguro de que los tres seguiríamos jugando con nuestras pistolas de aire comprimido. La normativa dice que para poder usar estas armas de aire comprimido tienes que tener o un terreno privado o ir a un campo de tiro por eso siempre que tengo ocasión de que me alguien me deje un terreno para jugar me llevo la pistola de aire comprimido. Pero desde hace mucho solamente puedo jugar a disparar con un tirachinas que me he construido y con eso puedo jugar en cualquier lado.