3 remedios de siempre para el calor, que funcionan

El aire acondicionado es uno de los inventos modernos más efectivos para el calor sofocante. Pero nuestros antepasados sobrevivían a las olas de calor sin electricidad. ¿Cómo hacían para mantener sus casas frescas? Pues usando algunos trucos muy buenos que funcionan y que tú también puedes utilizar para que tu hogar esté mucho más fresco sin gastar demasiada electricidad.

Airear al caer el sol es una costumbre muy buena que permite que el aire de la casa se renueve. Excepto en las ciudades en las que el calor se acumula en el asfalto y no refresca, lo normal es que a última hora de la tarde la temperatura descienda y sea mucho más agradable. Abre las ventanas y las puertas a los patios y deja que corra la brisa en casa.

Uno de los problemas de hacer esto radica en los mosquitos, por lo que debes de utilizar mosquiteras en tus ventanas y cortinas hilos en las puertas para que solo entre lo bueno de la tarde. De esta manera, podrás tener abierto incluso durante la noche sin preocuparte por las picaduras de los bichos.

La segunda costumbre que queremos reivindicar es la del abanico. Este invento tan sencillo y a la vez tan efectivo es perfecto para refrescarse mientras caminamos por la calle. Es bueno evitar las horas de más calor y también los lugares de más sol, pero con el abanico podemos disfrutar de una parada en un banco a la sombra o junto a una fuente mientras lo agitamos para sentir esa brisa tan reconfortante.

Hoy existen abanicos de muchos tipos, tanto para hombre como para mujer y no debes de olvidarlo nunca cuando llega el buen tiempo para aliviar los calores sin tener que estar todo el día con helados o refrescos fríos que pueden acabar sentándonos mal.

Por último, no dudes en recurrir a las plantas para conseguir sombra en tus terrazas más soleadas. Si el sol da con fuerza contra una de tus ventanas, colocar plantas en el balcón o incluso en macetas interiores ayudará a crear sombra y, además, le dará una gran belleza a tu salón o a tu terraza.

No debes de tener miedo en colocar plantas en tu dormitorio ya que aunque es cierto que consumen oxígeno durante la noche, la cantidad del mismo es tan pequeño que no tiene ninguna repercusión en tu salud.