La mayoría de las cuentas corrientes tienen comisiones, pero algunos bancos se han dado cuenta de que la gente está cansada de pagar por tener su dinero en el banco. Cuando se tiene una nómina es casi siempre obligatorio tener una cuenta corriente para ingresarla. También es necesaria para el pago de muchos recibos que no se pueden abonar de otro modo. Estamos en manos de los bancos porque el sistema está montado para que todo el mundo los necesite.
Pero los bancos también nos necesitan a nosotros y, tras la crisis, se han dado cuenta de que mucha gente comienza a pensarse el abrir cuentas mucho más que antes. Por eso, han comenzado a aparecer bancos que llevan a cabo la mayoría de su trabajo online y que ofrecen cuentas sin comisiones para quienes tienen su nómina allí. Además de tener una nómina, es normal que se pida que se domicilien algunos recibos. A cambio de eso, el cliente no paga por tener la cuenta, ni por las tarjetas y otros servicios como las transferencias.
Pero, ¿es posible abrir una cuenta corriente sin comisiones ni nomina? Sí, lo cierto es que ahora también es posible, especialmente si se trata de una cuenta joven o de una cuenta exclusivamente online. Los bancos online tienen menos gastos de mantenimiento que los gastos físicos, ya que no tienen que tener oficinas de cara al público con personal. Por eso, pueden permitirse ofrecer cuentas sin comisiones a sus clientes.
A cambio, el cliente se convierte, en cierta manera, en un trabajador del banco al ser él quien realiza las transferencias por Internet, realiza el pago de recibos no domiciliados o lleva a cabo diferentes gestiones, como imprimirse justificantes o incluso cubrir toda la documentación para solicitar un préstamo o una hipoteca. Por supuesto, la respuesta a un préstamo o a una hipoteca, vendrá de parte del banco exclusivamente, pero ya habremos llevado a cabo todo el proceso de papeleo que, habitualmente, realizaba un empleado del banco al que acudíamos y le dábamos la información.
La gente joven es la que más se beneficia de este tipo de cuentas ya que son los que menos utilizan los servicios de las oficinas. Están acostumbrados a relacionarse con las Apps de los bancos y a llevar a cabo gestiones online, por lo que no les supone un problema. Las personas de más edad, prefieren pagar comisiones y tener un trato personalizado.