– Arroz con productos del mar. Es un arroz muy típico de la época de estudiantes, cuando se quería preparar algo rápido pero que a la vez estuviera bueno. Para esto solo necesitas un vasito de arroz para calentar en el microondas y un par de latas, por ejemplo, una de berberechos en conserva y otra de mejillones. En menos de cinco minutos tendrás un plato bien rico y que no te habrá costado nada hacer.
Tiene la ventaja de que es un plato muy ligero, con muy pocas calorías y que además es saludable, especialmente si utilizas un arroz de tipo integral. Es perfecto para salir de un apuro o para esos días en los que cocinar es lo que menos apetece hacer.
– Arroz con pollo y verduras. Es un arroz ligero y muy fácil de hacer. El típico arroz con el que todos hemos comenzado a preparar “arroz cocinado” en lugar de la opción antes descrita. En la sartén o en la olla se vierte una pequeña cantidad de aceite y se dora el pollo. Se añaden una medida de arroz, dos y media de caldo de pollo y verduras variadas, que pueden ser congeladas para una mayor comodidad. Se cocina a fuego medio y cuando el agua se consume, se apaga el fuego. Se tapa el arroz y se deja reposar unos diez minutos, estando listo para disfrutarse.
– Arroz sacrilegio. Este divertido nombre no es oficial, pero muchas personas comienzan a llamar así a un tipo de arroz que todos hemos comido alguna vez y que a la mayoría, pese a su fama, nos encanta: el arroz con chorizo. Si bien es cierto que en una paella auténtica la presencia del chorizo sería un auténtico sacrilegio, cuando queremos preparar un arroz rápido y a la vez sabroso es una excelente alternativa porque le dará mucho gusto sin tener que usar más que dos ingredientes.
El primer paso está en desmenuzar el chorizo y freírlo en un poco de aceite. Se incorpora a continuación el arroz, moviéndose para que se impregne con el aceite y la grasa del chorizo y se añaden dos medidas y media de agua más que la medida de arroz. Solo con eso, tendremos un sabroso y calórico arroz que nos encantará y que también gusta a los más jóvenes de la casa.