¿Con cuánto tiempo de antelación se debe llegar al aeropuerto?

Las colas al facturar el equipaje, los problemas en los controles de seguridad y otros inconvenientes pueden comprometer el embarque de los viajeros menos previsores. Planificar la hora de llegada es fundamental, y el margen disponible varía en función de la época del año, el aeropuerto en cuestión y especialmente el destino. Antes de decidir cuándo estacionar en el Lavacolla parking Santiago, debe considerarse si el vuelo programado será nacional o internacional.

En los vuelos domésticos, así como en ciertos itinerarios europeos, la recomendación estándar es acudir al aeropuerto con un mínimo de noventa minutos de antelación. La puerta de embarque suele cerrarse más tarde, lo que concede a los pasajeros un mayor margen para facturar el equipaje, comprar lo necesario en las tiendas duty free y hacer otras gestiones sin temor a perder el vuelo.

En cambio, el margen de tiempo necesario para los vuelos internacionales es significativamente mayor: al cliente de aerolíneas se le aconseja presentarse en la terminal con dos o tres horas de anticipación. Por lo general, son trayectos con destino a países fuera de la Unión Europea o de la zona Schengen, y el cierre de la puerta de embarque se efectúa más temprano.

La hora, el mes o la cercanía de una fecha señalada (Año Nuevo, Semana Santa, etcétera) contribuye a la formación de colas y retrasos. Por otra parte, el tráfico de pasajeros no es igual en el aeropuerto de La Gomera que en el de Santiago-Rosalía de Castro. Cualquiera de estos factores puede ampliar o reducir el margen de tiempo necesario para embarcar sin riesgos.

A la hora de planificar la llegada al aeropuerto, hay que informarse de la previsión meteorológica, el tráfico existente o la disponibilidad de parking cerca de la terminal. Subestimar estas y otras eventualidades puede provocar la pérdida del vuelo.