En busca de la mejor playa de Ons

Siempre había escuchado hablar de las islas Ons como un pequeño paraíso en Galicia, pero no fue hasta que puse un pie allí cuando entendí lo especial que es este lugar. Nada más llegar en el barco desde Bueu, el aire salado y el verde intenso de la isla me envolvieron. Sin embargo, yo tenía una misión muy concreta: descubrir cuál era la mejor playa de Ons para un visitante como yo.

Lo primero fue dejarme guiar por la curiosidad. Apenas caminé unos minutos desde el puerto cuando me encontré con la playa de As Dornas. Su cercanía la hace muy cómoda, sobre todo si no quieres caminar mucho. Allí me tumbé un rato al sol y me di un baño rápido, disfrutando del agua fresca y transparente. Pero en mi interior sabía que debía seguir explorando.

Decidí continuar hacia el norte por los senderos de la isla. El paisaje me regalaba vistas espectaculares del océano y de los acantilados, hasta que llegué a la famosa playa de Melide. Había leído que era una de las más bonitas y, al verla, comprendí por qué. Es amplia, de arena blanca y fina, con aguas cristalinas que invitan a sumergirse una y otra vez. Además, al estar un poco más alejada, transmite una sensación de tranquilidad difícil de encontrar en otros sitios. Allí sentí que el tiempo se detenía, y pensé: “Quizás esta sea la mejor playa de Ons”.

Aun así, quise darle una oportunidad a otras. Pasé por Area dos Cans, con un ambiente más animado y familiar, y también por Canexol, que me sorprendió por su encanto y su proximidad al pueblo. Cada playa tenía algo único: la comodidad, el silencio, la belleza del entorno o la vida que la rodeaba.

Al final, me di cuenta de que la mejor playa de Ons no es la misma para todos. Si buscas comodidad y estar cerca del puerto, As Dornas es perfecta. Si prefieres un entorno más auténtico y tranquilo, Melide es la joya indiscutible. Para quienes viajan en familia, Area dos Cans puede ser la elección ideal.

En mi caso, me quedo con Melide. No solo por su belleza natural, sino porque allí sentí esa conexión especial con la isla, como si el mar, la arena y el silencio me recordaran lo afortunado que era de estar en un rincón tan mágico de Galicia.